El artículo nos comenta cómo sobrevive un joven de 18 años con un 40% de discapacidad mental. Iván, al cumplir la mayoría de edad tuvo que salir de la institución de acogida en la que vivía. Ahora vive en un parque de Las Palmas de Gran Canarias y en algún momento ha tenido que ser atendido en los hospitales más cercanos a causa de su discapacidad.
El Gobierno Canario interpuso una demanda para que un juez dictaminara si la incapacidad de Iván le impedía valerse por sí mismo y para que las autoridades asumieran su tutela, pero este proceso puede llegar a durar 6 meses. Por lo que lleva viviendo en la calle desde que cumplió la mayoría de edad.
El 15-M acampó donde el vivía, la calle, y hasta participó en el movimiento.
Iván no tiene problema en contar su vida a todas las personas que se interesan por él. Alrededor de él no se conoce ningún contexto familiar y lleva varios días sin que nadie conozca su paradero.
Este artículo nos plantea un serio problema: qué hacer cuando un joven discapacitado sin red familiar cumple los 18 años.
Es necesario que se cubran las lagunas administrativas en el menor tiempo posible, porque si no es así estos jóvenes se pueden llegar a encontrar abandonados por estas instituciones.
Cualquier joven que haya vivido en una institución tiene restada sus sensibilidades afectivas, y en la mayoría de los casos les supone un trastorno en sus comportamientos.
Es fundamental trabajar en prevención y a enseñarles a tener recursos y habilidades sociales.
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